Bastante intrigado me tenía este disco desde hace meses, ya que sólo escuchar a Mirai (Kawashima – lider de SIGH) del progreso de la composición y posterior grabación, mezcla y masterización, me hacía prever algo muy interesante y debo reconocer que el producto final superó con creces mis expectativas, ya que este disco es en pocas palabras sencillamente fenomenal, donde ningún detalle ha sido dejado al azar, formando parte de un todo, simplemente genial.
Quizás muchos se hacen una idea de cómo es este disco, pero insisto, al escucharlo supera cualquier expectativa, ya que debo reconocer, siendo un fanático de la banda desde los ‘90, siguiendo su trayectoria desde sus comienzos, los últimos discos, no capturaron mi atención desde Imaginary Sonicscapes (Century Media, 2001) y Gallows Gallery (Candlelight, 2005), si bien Hangman’s Hymn (The End, 2007), In Somniphobia (Candlelight, 2012), etc. son buenos discos, creía que la banda había perdido ese toque que la distingue del montón y que Euronymous supo ver al momento para contratarlos en su etiqueta Deathlike Silence Productions (DSP).
Pues bien, Graveward es un tremendo discazo en todo sentido, recuperando esa esencia de discos como Hail Horror Hail (Cacophonous, 1997) o Imaginay Sonicscapes, sumado al dinamismo de Gallows Gallery y lo pomposo de In Somniphobia, pero este disco va más alla, tal como ellos lo definen, Cinematic Horror Metal en su pura esencia, lo que viene a ser como estar presenciando el soundtrack “metalizado” de un film de horror, de esos de Fulci o Argento, a quienes entre otros, Mirai y compañía rinde tributo.
Este disco además corresponde al primer registro con su nuevo guitarrista, You Oshima, quien además estuvo a cargo de la grabación, mezcla y masterización de esta joya, lo cual sumado a su performance, lo destaca como un gran y completo artista. Ojo con él, quien además reemplaza a Shinichi, quien fuera guitarrista de la banda desde su primer disco y que salió de la banda en no muy buenos términos. El otro miembro original, Satoshi, se luce en cuerdas y tarros, lo que ratifica su preponderante importancia en la ecuación que es SIGH, completada por la carismática Dra. Mikannibal (y esposa de Mirai), con un aporte destacado en voces, efectos y saxofón (tema aparte es su performance en vivo) y Junichi Harashima en batería.
No se pueden destacar cortes por si solos, ya que este álbum debe apreciarse y disfrutarse como un todo. Podría mencionar que hay participaciones de personal de Meads of Asphodel, Shining, etc., que honestamente se ven un tanto pasadas a segundo plano frente a un disco tan soberbio como éste.
Definitivamente uno de los mejores discos de SIGH y sin duda uno de los candidatos a disco del año.
Rodrigo Jiménez