“Lamenting of the Innocent”
METAL BLADE, 2020
Si hay una banda que viene editando buenos discos es Sorcerer, luego de volver a la vida ya han editado 3 discos que han resultado ser una delicia para los seguidores del heavy doom metal. Este disco es la perfección misma, en donde sin duda estamos frente a un 10/10.
Este nuevo Lp, destaca de inmediato por su caratula y el concepto detrás del álbum: la maldita inquisición (nefasta como ella misma y amparada por siglos en una penosa religión).
Una intro da inicio al tema The Hammer of Witches, en la cual la voz de Anders, que pareciera mejorar álbum tras álbum con ese registro que recuerda a ratos al Sr Tony Martin, te hace disfrutar de inmediato de este álbum. Le sigue Lamenting of the Innocence, a mi gusto uno de los puntos más altos de este álbum, con su coro que te hace repetir y repetir en tu mente esas notas melancólicas, simplemente te transporta a la dimensión obscura de aquella época. Punto más que destacado el es trabajo de los guitarristas Kristian y Peter, quienes simplemente realizan la labor de condimentar de manera perfecta la melancolía, llevando este tema a alturas épicas del más alto nivel en el estilo (ojo con el video de clip de este tema, simplemente uno de los mejores que he visto). Le siguen Institoris y Where Spirits Die, ambos temas majestuosos y en una dinámica en la cual el álbum no se vuelve monótono, al contrario va mostrando todos los recursos de una banda solida y muy bien estructurada con una base rítmica perfecta dada por Justin y Richard (bajo y batería respectivamente).
Deliverance es simplemente una pieza maestra que viene a coronar un trabajo de lo más profesional y en donde se cumple el sueño de los fans del estilo de juntar a CANDLEMASS con SORCERER. Esto se logra con la participación de Johan Längquist (actual vocalista de CANDLEMASS), quien participa haciendo un dueto en las voces, acompañados de un cello (instrumento de cuerdas) interpretado por Svante Henryson, que le da el toque ultra clásico.
Age of the Damned marca un giro aun más obscuro, en donde el ángel de la muerte esta desatado, esparciendo toda su pestilencia. Gritos de desesperanza y agonía son los sentimientos que se expresan en esta parte del disco. Le siguen Condemned y Dance with the Devil, ambos continúan con el excelente trabajo sobre todo la primera que incluye, al igual que Deliverance, algunas guitarras acústicas. Esto aumenta la sensación melancólica de estar cerca de la muerte y de sentirse condenado a quemarse en el fuego eterno.
Path of Perdition pone el punto final a este excelentísimo trabajo (ojo que el digipack contiene un bonus llamado Hellfire), aquí destacan unos teclados que añaden aun más leña al fuego de una hoguera en donde no se pudo quemar el espíritu pagano que impulsa a esta banda a seguir creando hechizos.
“All Hail the Dark Power of the Sorcerer”
Hatred