Si pudiese armar un encabezado para esta descripción podría perfectamente ser el siguiente: “El Review que No fue…”, porque esta banda originaria del cerro Larraín de Valparaíso, por allá cerca del año 2003, jamás logró publicar esta grabación que iniciaron el año 2008.
Y si bien The Unexpected fue creciendo a través de ensayos y presentaciones en vivo, con bastante aceptación tanto en la región de Valparaíso como en Santiago, diversos cambios inesperados en la vida de varios de sus integrantes obstaculizaron dar el visto bueno de la mezcla final del disco. Ya son más de siete años de la grabación de, Elements of Surprise.
Quienes participaron de este acto fueron Andrés Alvear (Lead guitar), Gabriel Vargas (Rhythm guitar), Robinson Díaz (Drums & percussion), Miguel Galdames (Bass) y Pablo Meléndez (Vocals).
En cuanto a la música, nos encontramos con un melódico Death Metal muy en la línea de las bandas nórdicas de los noventas, con un protagonismo elevado por parte de sus guitarras y un juego permanente de cambios de tonos de voz por parte de su vocalista.
El álbum se inicia con Release, cuyos pegajosos riffs te quedan dando vueltas por horas en la cabeza. Asimismo destacan los constantes cambios de ritmo y quiebres de batería. Los solos de guitarra son breves pero de perfecta ejecución. Tal como se indicó más arriba, existe un permanente juego vocal que aporta a las diversas atmósferas que va dando The Unexpected a esta composición.
Continúa el tema que da título al disco, que destaco básicamente por su potencia y melodía que se entremezclan a la perfección. Es un tema bastante complejo en su elaboración e interpretación, dado que tiene un sinfín de cambios, quiebres, redobles, con riffs que aceleran y desaceleran de manera permanente. Sin embargo, y a nivel de gusto personal, enfatizo el siguiente tema: We Will Persevere, cuyos riffs fusionan por momentos el sonido escandinavo con aquel Death Metal propio de Nueva York (USA). Cuando ya casi no queda aire una voz en off con acordes de guitarra clásica dan algo de paz, pero para el bienestar de nuestra locura la distorsión cobra nuevamente protagonismo en el último minuto.
En total son ocho temas (incluido un Outro de guitarra clásica) para 36 minutos. Sin duda que se lamenta el hecho de que estos porteños no hayan -hasta ahora- podido concluir con el objetivo de publicar su creación. Es de esperar que algún día cumplan con ello.
Si alguien se anima a contactar a la extinta banda pueden escribir a:
Andrés Alvear: alveara@hotmail.com
Pablo Meléndez: pmelendezc@gmail.com
Miguel Ferrer Vergara