Castration To The Priest: Death Metal Fest 2019

Castration of the Priest: Death Metal Fest 2019

Texto y fotos por Andrés Padilla
Fotos Mauricio Curihuaiqui (Atomic Aggressor y Vomitory)

Jueves 5 de Septiembre
ATOMIC AGGRESSOR – VOMITORY

Al momento de haber llegado al recinto de la ya tradicional Discoteque Blondie, nos encontramos con la sorpresa de que dos de las bandas del cartel no habían llegado al país. “Total desastre” pensé. En las afueras del lugar, en donde se ha hecho costumbre hacer la previa al show, no había nadie que no hablara de otra cosa. No era para menos, todos con la cara desfigurada por la noticia de que INCANTATION se había quedado en Perú por problemas con su visa de trabajo. Lo mismo pasaba con los otros norteamericanos del cartel, como lo son UADA, banda que en mi opinión estaba fuera de lugar en este cartel, pero como todos sabemos, a veces en este juego de los productores de eventos, para traer a una banda, te meten la puntita con otra. Más allá de eso, seguramente había algunos fans de UADA que se tuvieron que tragar esta lamentable noticia de que el grupo no participaba en la primera jornada de Castration Of The Priest, festival que se tildaba de Death Metal, pero que de todas maneras incluía insignes artistas de otros géneros como por ejemplo ROTTEN SOUND o FULL OF HELL. En resumidas cuentas, ayer nadie entendía mucho qué pasaba. Estaban todos con la sed de presenciar a los ya veteranos INCANTATION, quienes a esta altura del juego, son una eminencia en lo que respecta a Death Metal arrastrado y oscuro. John McEntee, indiscutible líder y fundador del grupo se comía las uñas en Lima mientras acá en Santiago, la jauría de Death Metaleros apagaba la sed con cerveza barata de luka en la calle, antes de que dentro del recinto, te asalten con precios ridículos para consumir alcohol.

A pesar de toda la confusión y rumores (escuché por ahí que incluso estaban los músicos de INCANTATION, menos su McEntee que estaba atrapado entre la frontera), todo el mundo aceptó la derrota y se la jugaron por apoyar el evento con una asistencia tremenda.
La productora a cargo, Weapon Of Conquest, y la voz oficial como Adolf Clement, trataron de mantener la calma dejando un comunicado por Facebook explicando lo sucedido.
Para bien de ellos (la producción), y teniendo en cuenta el excelente prontuario de eventos pasados, los asistentes entendieron lo sucedido. No hubo desmanes y a pesar de todo, el recinto se llenó.

De todo el caos y mala gestión de esta parte de la gira, los beneficiados fueron los locales ATOMIC AGGRESSOR, quienes tuvieron que abrir los fuegos y extender su show, llegando a tocar una hora de intenso Death Metal, ese que ya es una marca registrada de los nacionales.
Patentado hace más de treinta años con su clásico demo Bloody Ceremonial, del cual tocaron algunos cortes que la audiencia recibió feliz, ya que a esta altura, son verdaderos himnos patrios del Metal chileno; Beyond Reality o The Allucination hicieron mover los cuellos de toda la tribuna. Al mismo tiempo, el grupo aprovechó de presentar completo su más reciente EP Invoking the Primordial Chaos, el cual mantiene la estética y marca registrada del grupo.
Me atrevo a decir que ATOMIC AGGRESSOR dio una de sus mejores presentaciones en lo que va del año. Show extendido que se hizo corto y fue ejecutado a la perfección. Julio Borquez en las guitarras junto al fundador de la banda, Enrique Zuñiga, dieron cátedra de cómo hacer flamear la bandera del Death Metal. Lo mismo podría decir de Alejandro Díaz (voz) y Álvaro Llanquitruf en la batería. Un cuarteto que junto a su quinto miembro en las perillas como lo es Gerardo Pinto, manager y sonidista de la banda, confabularon un show intenso, directo y lleno de adrenalina, donde no hubo respiro ni momentos para descansar.

De todas maneras creo que a raíz de la mala fortuna que tuvieron INCANTATION y UADA, insisto y repito, los más beneficiados fueron ATOMIC AGGRESSOR y los suecos VOMITORY, quienes como era de esperar, también extendieron su show para masacrarnos en su debut por tierras chilenas. En vez de ser la entrada del menú, terminaron siendo el plato de fondo. No se lo esperaban ni en sueños.
A los suecos ya se les había visto en Chile en las redes sociales el día anterior al show. Eso presagiaba que el ambiente iba a ser una verdadera fiesta. Y así fue.
Ver a estos lunáticos vikingos, fue lo que esperábamos todos.

Como sabemos, en Suecia la palabra Death Metales es para tomársela en serio y estos demonios que a pesar de haber anunciado su retiro de las pistas en año pasado, se dieron el lujo de reanimar sus energías para visitar un continente que nunca pisaron como banda. Afortunados nosotros que presenciamos un tremendo show por parte de este cuarteto que no paró de sacudir sus cabelleras al son de la violencia sónica que en conjunto lograron plasmar por más de una hora de intenso show.
Al verlos en vivo, había pasajes que te recordaban un poco la mística y atmósfera de bandas como DISMEMBER (otros que vuelven) o NAPALM DEATH, dos bandas que apuntan a diferentes ángulos pero que comparten algunos códigos en común. VOMITORY en vivo es una máquina de moler cráneos. No hubo pausas, no hubo consentimiento para melodías ni atmósferas. Lo de ellos fue destrucción total.
VOMITORY repasó toda su discografía, incluyendo cortes clásicos de su primer disco Raped In their Own Blood (1996).
Pasaron por la parrilla temas como Possessed, Perdition, Regorge in the Morgue, Madness Prevails (nombre perfecto para reflejar lo que pasó ayer), Rotting Hill, Serpents, Terrorize Brutalize Sodomize, Primal Massacre, y los finales para el cierre con Chaos Fury y Raped in their own Blood.
Post show, el grupo bajo a la cancha para saludar a los fans y tomarse fotos y poder conversar relajadamente. Entre las cientos de botellas de vidrio tiradas en el piso, los bangers más anáticos se quedaron esperando para compartir con los gigantes escandinavos que no tuvieron problemas en firmar autógrafos y dar sus opiniones sobre su candente show.
No quedaba más que esperar la jornada de hoy. ¿Qué va a pasar?, ya veremos.
Se entiende que INCANTATION debería tocar hoy viernes en Paraguay. Sí leyeron bien, Paraguay. Después se van a Brasil, por ende, si somos afortunados, podremos tenerlos en los escenarios hoy. Lo mismo con UADA. Sin embargo, eso está por verse.

A pesar del tremendo “cagazo” que todo esto generó, el cartel restante de hoy con DEAD CONGREGATION como plato de fondo, es bastante atractivo como para quejarse. Tanto los griegos como las otras insignes bandas del cartel, como lo son los fineses ROTTEN SOUND y los “grindcorianos” de Maryland Estados Unidos, FULL OF HELL, van a dejar todo en la cancha. Eso está garantizado. Esperemos también que así sea con los nacionales MAGNANIMVS, otra de las marcas registradas en términos de Death Metal brutal “Hecho en Chile”.
Cómo muy bien dice el tema de VOMITORY, dejemos que la “locura prevalezca” bajo la sombra del Death Metal.

Viernes 6
MAGNANIMVS, FULL OF HELL, ROTTEN SOUND
DEAD CONGREGATION, UADA, INCANTATION

Vaya vaya… después de la intensa jornada del Jueves, que a pesar de haber sido forzosamente resumida a dos bandas que terminaron dejando todo en el escenario como lo fueron ATOMIC AGGRESSOR y VOMITORY, era el turno del plato de fondo. Esto prometía dejar a más de una centena de metaleros con la mansa caña y con el cuello hecho mierda.

Son muchas las emociones que tengo dentro de mi cabeza. Ordenarlas y soltarlas de un paraguazo será una tarea que seguramente dejará algo olvidado, pero no temo al equivocarme cuando digo que ayer viernes pude vivir uno de los mejores conciertos a los que he asistido en los últimos años en Chile. No hay palabras que puedan describir lo vivido ayer. El marco de público, que siempre es muy importante tanto para la producción como para el artista que se esfuerza por lograr atraer el público suficiente, y por otro lado, para el músico que sueña con tocar ante una audiencia llena de esa adrenalina que sirve para que la atmósfera de un concierto sea la indicada. Todo eso ayer estuvo presente. Una experiencia que ningún asistente va a olvidar, menos aún, los músicos que tocaron en ya tradicional bunker de la Alameda.

MAGNANIMVS desató el caos muy temprano. Eran las 17 horas y el forzado trio (uno de sus guitarristas estaba mal de salud), tuvo la incómoda tarea de abrir los fuegos frente a un par de decenas de bangers que lógicamente iban a estar presentes. Era imposible pensar que MAGNANIMVS tocara con el marco de público que por ejemplo le tocó el dia anterior a ATOMIC. Todo el retraso y re-organización del show fue estrictamente perjudicial para esta ya consolidada banda de Death Metal, que desde sus inicios ha sido conocida por su enfermiso y bestial sonido. Death Metal sin misericordia. Intenso de principio a fin y en donde las tormentas de riffs se confunden en una verdadera tormenta de odio y destrucción. Para sorpresa de los presentes, y también debido al “desgaste intestinal del día anterior”, MAGNANIMVS tuvo que acortar su show en al menos 15 minutos.
Desplegando lo mejor de su repertorio que incluyó cortes de su primer demo, y al mismo tiempo, de su más reciente producción Impure Ways Beyond Shadows (2018), los tres guerreros lograron desahogarse con una propuesta directa y sin filtros. Los presentes no entendían mucho por qué la banda se bajaba del escenario tras 25 minutos de show.
Presentación breve, pero intensa. Al menos el grupo quedó conforme con lo entregado y eso quedó plasmado al verlos tras bambalinas con la sonrisa de haber hecho la tarea y de tener tremenda fiesta para celebrarlo. Pasaron cortes como Omen 666, Raising The Misery Subjugator, God o Cruelty, The Lugubrious Abomination Of Torment, Libation To He Dingir-Xul y Delivers The Power To Overthrown The False Prophet.

Era el turno de una banda que en lo personal, eran completos desconocidos. Desde Penssylvania, Estados Unidos y fichados por la emblemática etiqueta Relapse Records, debutaban en Chile estos lunáticos llamados FULL OF HELL. Y como bien lo dice su nombre, su frenético despliegue gutural hizo crujir las paredes de la Blondie con una propuesta poco vista en estas tierras. Realmente me sorprendieron con su show. Presentando su más reciente trabajo Weeeping Choir (2019) y con una evidente estética ligada al Thrash, los cuatro integrantes de esta banda dejaron claro que lo suyo va de la mano con el Noise y las enfermizas influencias que dejan entre ver con su música. Me refiero a bandas como The Body o The Haxan Cloak. Debo admitir, y lo repito, que esta banda fue una total sorpresa. Sin ser tampoco mi plato favorito, concuerdo con muchos de los asistentes que los, que era necesario darle un vuelco diferente a nuestras neuronas. Sirvió para caldear el ambiente y darle un toque diferente a esta fiesta que se vivió ayer. Destaco el trabajo de su vocalista Dylan Walker, quien manipulaba una máquina con samplers y no paraba de saltar y hacer unas guturales del infierno. No sé en qué habrá terminado su garganta pero un despliegue así de esquizofrénico no se lo traga cualquiera.

A esa altura la caldera ya estaba encendida. Era el turno de otra de esas bandas esperadas en estas tierras: ROTTEN SOUND, verdaderos íconos del sonido Death Grind y con un prontuario respetable que los tienen girando constantemente, y por cierto, siendo parte de la mayoría de los festivales de la orbe. Con su última placa Abuse To Suffer (2018) editada por la etiqueta francesa Season Of Mist, los cuadro escandinavos hicieron rugir sus guitarras puntualmente a las 19 hrs. Con el sonido característico del Death Sueco, esa distorsión que ya es una marca registrada, y la velocidad indiscutible de su maquinaria sónica, el cuarteto se paseó sin problemas en el escenario entregando un set conciso y potente. De inmediato recordé a los desaparecidos y gloriosos NASUM. Sonaron Self / Power, Salvation, Trashmonger, Fear Of Shadows, Brainwashed, Choose, Lazy Asses, Insects, Void, Decay o Blind entre varios otros de su poderoso repertorio.
Casi al finalizar de su show, y para mi sorpresa, tras bambalinas veo a la gente de HIRAX y VOMITORY presentes en el backstage disfrutando atentos de lo que acontecía en el escenario.
La fiesta ya estaba en llamas dentro de camarines, donde había un mini bar que sufrió al recibir a tanto músico sediento por cervezas, Jack Daniels y las ilimitadas piscolas que tuvieron que degustar los artistas extranjeros. Había que hacer patria y mostrarles el trago nacional predilecto.
Al mismo tiempo que toda esta fiesta seguía su curso, ya venía en camino el equipo de músicos atrapados el día anterior en Perú. Los herméticos y cautelosos UADA llegaron a tiempo y junto a John McEntee, quien se mostró muy agradecido devolver a estar en Chile, recordando siempre su debut en estas tierras en ese lejano debut en el Teatro Caupolican cuando tocaron hace 21 años junto a DEATH, CANNIBAL CORPSE y DORSO. Mítico concierto que sigue siendo uno de los más recordados en la historia metalera del país.

Pero bueno, la ceremonia finalmente se teñía de negro cuando siendo las 20 hrs se abría la puerta del infierno con la presencia de, a mi parecer, la banda más esperada de todo este evento. Nada menos que los griegos DEAD CONGREGATION, agrupación que para quienes devoran este sonido, son sin lugar a dudas, uno de los mejores exponentes del género.
Con una Blondie repleta y sedienta de más Death Metal, sus cuatro integrantes ejecutaron un show perfecto, oscuro y lleno de ese veneno que se percibía en la atmósfera. Anastatis (voz) con una polera roñosa y regalona de PROCESSION (banda en la que ha estado participando en vivo), sin discursos baratos ni de relleno arremetieron con Martyrdoom, corte que representa fielmente lo que significa su propuesta, esa inspirada en otra mítica leyenda como es IMMOLATION, referente obvio cuando escuchamos a los griegos. No menor también la influencia de INCANTATION sobre ellos, y que precisamente esta noche los juntaba para conmemorar esta inolvidable noche que seguramente va a quedar en la retina de todos quienes participaron.

Afortunadamente, el show de DEAD CONGREGATION se extendió lo necesario, alcanzando a pasar la hora y fracción de hedor a muerte. Vaya espectáculo que dieron, con una audiencia cabeceando y gritando desenfrenadamente ante la presencia de los griegos que se mostraron sumamente agradecidos y contentos con lo entregado ayer. En camarines pude comprobar y charlar con esta gente que tiene los pies muy bien puestos en la tierra. Humildad ante todo y con un Anastasis absolutamente enterado de lo que sucede en estas tierras. En su colección personal tiene la mayoría de los demos clásicos del Death Metal chileno y conoce a la perfección lo que sucede acá. Todo esto, a raíz de su constante apoyo y compromiso con su sello Nuclear Winter Records.
El conjuro incluyó Lucid Curse, Quintessence Maligned, Vanishing Faith, Wind’s Bane, Schizma, Morbid Paroxysm, Only Ashes Remain, Promulgation y Teeth into Red. Insisto, show perfecto de principio a fin. Ejecución y sonido.

Tipo 21 hrs y minutos extras, suben los norteamericanos UADA, con una propuesta que también marcaba diferencias en este evento. Visualmente proponían algo distinto al salir todos encapuchados y de negro. Rostros cubiertos y un aura perfecta para generar esa atmósfera envolvente que se esperaba en ellos. Su Black Metal inundó el ambiente con melodías filosas y agudas. Para ser una banda relativamente nueva, estoy seguro de que van camino a las grandes ligas ya que su show, que en mis gustos personales, no es de mi cabecera, demuestra que hay un profesionalismo y compromiso evidentes.

Entradas las 22 horas y con la sed terminal crónica aguda de todos los asistentes, varios litros de cerveza degustada por muchos, subían al escenario los indiscutibles INCANTATION, quienes la noche anterior dejaron a más de alguno con las venas hinchadas. Honestamente jamás pensé que se iba a lograr re organizar todo el enredo que significaba atrasarse un día en el marco de una gira sudamericana. Afortunadamente y gracias la gestión de Weapon Of Conquest y Tumba Records, se alinearon los planetas para que el tata John McEntee llegara a tiempo a Chile junto a sus compatriotas de UADA. De ahí a que era entendible que les dieran el turno de cerrar la noche, no sólo porque eran la banda con más trayectoria del cartel sino que era imposible de otra manera.

Si hay algo que reparo en esta banda, son sus constantes cambios de alineación. Por ahí discutíamos que John se había farreado la posibilidad de tener un vocalista como Daniel Corchado (THE CHASM), pero es indiscutible que McEntee ha sabido comandar y liderar su banda sin problemas.

Empalizaron a todos los asistentes con su arrastrado y demencial Death Metal roñoso y cavernoso. Los fuegos los abrieron con Entrantment Of Evil, clásico de clásicos del género. Desde ahí vino una oleada de muerte con Rites Of The Locust, Devoured Death, Lus Sepulcri, Unholy Massacre, Ascend Into The Eternal, Carrion Prophecy, Deliverance of Horrific Prophecies, Ancient Arise, Shadows from the Ancient Empire, Ibex Moon, Impending Diabolical Conquest y Profanation.

Para cerrar esta crónica, no puedo dejar de agradecer a la producción por la oportunidad de compartir con todas las bandas presentes. Haber estado codo a codo con los músicos, conversando extendidamente, sin la irritante tensión del ego que a veces suele subirse en muchos personajes, fue simplemente un placer que pocas veces nos toca vivir. Son muchas las personas y amigos de la vida que estuvieron ayer. Imposible mencionarlos a todos, pero definitivamente no creo que alguien se haya ido con una sensación amarga. El Jueves, y ayer sobre todo, se marcó un precedente en el país. Esta escena subterránea ha sido capaz de congregar un espectáculo que se podría considerar como un verdadero privilegio.

Y atentos camaradas que el Miércoles 11 de Septiembre en MiBar no se van a encender neumáticos precisamente, habrá un regalo que será anunciado por Weapon Of Conquest dentro de pocas horas.

El Death Metal prevalece, sólo la muerte es real!

Andrés Padilla

Galeria de fotos ATOMIC AGGRESSOR ( por Mauricio Curihuaiqui)