Demoniac Paroxysm
Memento Mori, 2018
Últimamente me había estado acostumbrado a comentar discos nacionales, ya que hay que reconocer algo: “la industria” subterránea del país ha florecido de manera inesperada.
Al mismo tiempo, en el extranjero la situación no es muy distinta. Sin embargo, y con la abundancia de prensa especializada (revistas, páginas weds, zines, blogs, youtube, etc) he llegado hace un tiempo a la conclusión de que no hay mucho qué hacer respecto a los lanzamientos extranjeros. Prefiero de todas maneras hablar de bandas nuevas, que del último de Cannibal Corpse o Deicide, bandas que ya tienen pavimentado sólidamente su camino. Es hora, de seguir dándole espacios a los que se esfuerzan, a los humildes que desde las alcantarillas emergen con buenos trabajos como este que editó la joven banda mexicana MORBID MESSIAH, quienes en su corta edad (se fundaron el 2015) ya cuentan con este brutal asalto editado por otro emergente, honesto y consecuente sello como Memento Mori, quienes desde España han roto la tradición y monarquía que otros estilos han predominado en esas tierras, ya sea editando material como este, y de algunas bandas nacionales como SOULROT o PRAISE THE FLAME entre otros de sus más destacados actos.
MORBID MESSIAH apela a lo bruto, a lo crudo, a lo que se escucha desde las cavernas cuando le pones “play” a este implacable disco debut Demoniac Paroxysm, que en su totalidad es un verdadero baño de Death Metal, lleno de guturales oscuras y agónicas, acompañados con riffs siniestros que oscurecen cualquier espacio.
Tras la edición de su EP debut In the Name of True Death Metal (2016), este acto llamó inmediatamente la atención de quienes buscan con pinzas esas viejas/nuevas melodías que rinden tributo a este implacable género que bandas como Sadistic Intent saben representar orgullosamente. Por supuesto, el viejo y roñoso aura ochentero que cultivaron bandas mexicanas como Cenotaph o Shub Niggurath está presente en este trabajo que no tuvo excepciones para dejar detalles sueltos.
Rise Of The Rotteness abre el show que da paso a una experiencia llena de Death Metal crudo, sin adornos tecnológicos ni mucho menos ese ego que a veces muestran los músicos al tratar de demostrar que saben tocar su instrumento. A veces, para tocar Death Metal no se necesita ser el más rápido, o el más técnico, sino que hay que sentirlo en la sangre, en el alma. Los nueve temas son una fiesta de Death Metal primitivo.
Probablemente, como muchos otros lanzamientos, puede que este trabajo llegue a oídos selectos, o por el contrario, con el tiempo se diluya como un grato recuerdo (como suele pasar con muchas agrupaciones que van y vienen). He de esperar que el apetito y sed de este MORBID MESSIAH sea solo el comienzo de una larga carrera.
El trabajo gráfico de Mark Riddick en la portada, como siempre, dejando en claro por donde aprieta el zapato.
Bien por Memento Mori que está siempre en la búsqueda de objetos desconocidos.
Andrés Padilla