Mushantufe / Dark Descents, 2015
Este joven y furioso cuarteto de Santiago está destinado a dejar una huella imborrable dentro del género subterráneo local e internacional, sobre todo este año lanzando su esperado álbum debut, registro que con sólo ocho cortes de un violento y preciso Death Thrash -cargado de balas tendenciosas al Black Metal- se posiciona a la cabeza de sus pares. Literalmente, y en no más de veinte y cuatro minutos, Satan Rebellion Metal, se arrima sin obstáculos para postular como uno de los mejores registros programados a salir durante este 2015. Así de drásticos.
El cuarteto está formado por Cristobal –batería-, Dead Goat –guitarra-. Ambos también forman parte de otro acto a tener en cuenta, como lo es ANCIENT CRYPTS. Se les suman, Enzodomizer –guitarra y coros- y el más reciente integrante, Bato –bajo y voz-.
Vale destacar que esta agrupación ha sabido construir su sonido y reputación a puntas de conciertos por todo Chile y con un prontuario digno de bandas ochenteras, editando demos y splits a diestra y siniestra, como deberían hacerlo todos los grupos que piensan debutar con su mente clara en lo que quieren lograr.
Rise of the wrath of Satan, es simplemente el inicio de un delirante y endemoniado vendaval de riffs que desatan de inmediato el caos en nuestra mente. Riffs tras riffs te conquistan de inmediato.
A pesar de que INVINCIBLE FORCE suena a ciegas que fue influenciado en sus inicios por los teutónicos DESTRUCTION, hoy en día, esas influencias están muy poco visibles. Es más, diría que casi ni se notan, ya que es otro el olor y aroma que expelen sus canciones (aunque en Unholy Trinity algo se les nota).
Uno de mis temas favoritos del disco es Summoning The Black Destruction, corte que demuestra el destructivo talento de este acto que no se queda sólo en buenos riffs, sino que también alucinantes solos de guitarra que incorporan veneno y locura al sonido.
Como bien lo define la etiqueta norteamericana a cargo de su edición en CD y vinilo, “este grupo es para fans de FORCE OF DARKNESS, DESASTER, NIFELHEIM o los primeros días de POSSESSED”. Nada de extraño si escuchan este barbárico ejemplo de cómo se debería tocar el Metal hoy en día: con vehemencia, fuerza, rapidez, salvajismo y precisión. Más aún si las letras están enfocadas a escupirle en la cara al decadente cristianismo.
Sumemos además que la parte gráfica está a cargo del talentoso Mark Riddick, quien indudablemente aporta con su idoneidad y trayectoria atrayendo las miradas de quienes comienzan a ver a nuestro país, como un territorio fértil que no deja de expulsar lo más ardiente del Metal.
Me quedo con la sensación de que grupos como INVINCIBLE FORCE son y seguirán siendo el orgullo de una nueva generación de bandas que nacen con las cosas más claras y al alcance de sus manos. Está en ellos aprovechar este talento que no es fácil encontrarlo a la vuelta de la esquina, pero vaya que difícil y duro es saber sacarle el provecho necesario.
Se podría decir que son un diamante en bruto en vías de convertirse en una de las futuras referencias obligadas del género en Chile y Sudamérica.
Andrés Padilla