TRIPTYKON
Melana Chasmata
Century Media, 2014

Tomas Gabriel Fischer (alias Tomas Gabriel Warrior) la hizo de nuevo. Como el nombre de su banda indica, Triptykon es el tercer proyecto/banda de Warrior después de Hellhammer y Celtic Frost. Triptykon es una técnica utilizada por los pintores medievales como Hieronymus Bosch en el que el pintor divide su trabajo en tres paneles, así que quizás el Sr. Warrior sugiere un paralelismo dentro de su propia trayectoria musical.

Melana Chasmata (traducción aproximada: "valles depresivos / profundos") divide su público al instante: o se odia o se ama. Muchas personas que adoraban a los esfuerzos anteriores de Warrior estaban molestos por los elementos experimentales de Triptykon, como voces de rango bajo limpio, cantantes femeninas, el uso de arpegios de guitarra y la sensación general de opresión y atmósfera espeluznante. Parece que Triptykon quería producir una interpretación sonora del impresionante arte de tapa de HR Giger, una mezcla extraña de entidades alienígenas mecánicas y biológicas.

A partir del primer tema, "Tree of Suffocating Souls," Triptykon suena muy parecido a los inicios de Celtic Frost. No importa cuán diferentes puedan ser las guitarras, los estudios de grabación, amplificadores y efectos utilizados, el sonido de guitarra de Warrior está ahí. Puede sonar primitivo y simple para los virtuosos de la guitarra, pero su sonido es una marca reconocible para todos los metaleros con la muerte en sus venas! Las voces son también sus gruñidos característicos, pero ha añadido coros hablados que añaden un quiebre y amplitud impresionante a los temas.

He leído en Internet que muchas personas consideran este álbum como un disco Doom Metal. Puede ser cierto, teniendo en cuenta la increíble atmósfera oscura y espeluznante, pero Melana Chasmata incorpora secciones de Thrash y Black metal junto con el Doom, y añade algunas secciones "melódicas" realmente retorcidas, por lo que creo que es muy difícil resumir el estilo del álbum. Es casi imposible encontrar algo con este grado de inmersión en este sonido oscuro torturado; sólo unos pocos elegidos son capaces de crear esta monstruosidad sónica. Como tal, muy pocas bandas vienen a mi mente a modo de comparación, excepto tal vez Virgin Black y Agalloch, como referencias distantes.

Melana Chasmata está lleno de agresión, oscuridad y odio. Es a ratos Doom y a ratos Thrash, y gótico en otros, pero la mezcla es emocionante, inquietante, oscura, bella y adictiva. No hay duda de Celtic Frost fue un pionero al incluir algunas bellas voces femeninas por encima de melodías muy pesadas, doomy y agresivas (como To Mega Therion de 1985). El aspecto de la voz femenina está totalmente desarrollado en este álbum, pero el oyente debe estar al tanto, no esperes voces como la de Tarja de Nightwish. Las voces femeninas en este disco no crean dulzura o luz al escucharlas, sólo aportan un fantasmal y un retorcido sentido den lo espeluznante. Como elemento nuevo, podemos escuchar voces de muy bajo rango, a veces parece casi inhumano como el canto de monjes de Chtulhu procedentes de las profundidades del océano.

Para cuando llegamos a los temas finales "Aurorae "y "Demon Pact", el álbum te ha sumergido completamente en él. El primero es casi un tema de post rock compuesto por simples guitarras limpias y distorsionadas con voces bajas limpias habladas que son casi hipnóticas a veces. El segundo es un tema industrial espeluznante que se siente como un robot orgánico lentamente consumiendo todo y a todos a su paso sin perspectivas de solución.

Aunque escucharlo es una experiencia muy desagradable e inquietante por alguna razón desconocida, Melana Chasmata es uno de esos discos que quieres escuchar una y otra vez. El verso "¿Era mañana, o será ayer " gruñido por Tom Warrior en "Horus/Agressor " hace 30 años parece ser aplicable hoy. A través de la niebla y la locura, Warrior se ha reinventado a sí mismo otra vez a través de esta obra maestra sin negar su pasado.

[ Carlos Briones ]