Para ser bien honesto debo confesar que tenía ciertas dudas respecto al nuevo disco de NECROSIS. Si recuerdo algo lo que fue Enslaved To The Machine (segundo disco, Toxic Records, 2001), se me viene a la mente un intento por resucitar a un grupo que había dejado la brecha muy alta con su debut, The Search (Heavy Metal Maniacs, 1988). No sé por qué pero con los años te das cuenta de que ciertos discos simplemente no encajaron en tu retina, y precisamente era eso lo que me había provocado Enslaved To The Machine. Sin crucificarlo, no creo que sea el disco más importante de este grupo. Con la lejanía que da el tiempo ahora veo a ese disco como un trabajo que logró los objetivos planteados.

Por otro lado hay que tener claro que NECROSIS sufrió una metamorfosis interna que finalmente terminó en que sus integrantes fundadores se hayan separado definitivamente; por un lado formando otra banda (Andrés Marchant y Nata Infante en KINGDOM OF HATE, quienes también acaban de lanzar The Search, una especie de nuevo disco con revisiones antiguas), y por el otro, Andy Nacrur (batería), se haya enrolado en la odisea de llevar la bandera de esta banda que sigue siendo una de las primeras que nació en la primera mitad de los ochenta.

Ahora bien, entrar en detalles del por qué estos músicos optaron esos caminos creo que no nos corresponde. Primero, por la cercanía que tenemos como medio con ellos, y segundo porque es como meterse en una pelea de matrimonio. No tenemos nada que hacer. Está claro que es asunto de ellos y nadie más.

Reborn, tercer disco en estudio bajo el nombre de NECROSIS, como muy bien lo dice el nombre, es una especie de resurrección para Andy Nacrur, el principal gestor de esta placa. Junto a él están Gustavo Robles (voz), Sergio Aravena (guitarra), Rene Mundaca (guitarra) y Rodrigo Onetto (bajo, ex REQUIEM, ex CAOS). Tras haberlo escuchado en varias ocasiones y darle el merecido tiempo, el veredicto que se me viene a la mente es calificarlo como un excelente registro.

Musicalmente debo confesar que me sorprendieron bastante. A diferencia de su antecesor disco, este nuevo esfuerzo sí pudo hacer calzar las piezas de una máquina destinada a hacer buenos riffs y armonías. Por alguna razón, quizás un sexto sentido, siento que en este nuevo intento, las influencias de sus integrantes han jugado a favor del grupo: Gustavo Robles trae al tablero una dosis de buenas vocalizaciones que siempre me han recordado grupos como FORBIDDEN, banda que estoy seguro él es un seguidor (más ahora que están por editar un disco nuevo). La dupla de guitarras -no tengo claro si hay un "capitán" entre ellos- aporta con excelentes riffs que pasan desde lo nuevo que hace EXODUS, hasta algunos toques del PESTILENCE (era Testimony Of The Ancients). Los solos de guitarra muy en la onda Gary Holt (EXODUS) con buen dominio de los dedos y las melodías. Nada que decir con la percusión que a estas alturas, Nacrur –para lo que lo conocen- saben perfectamente que es su puesto ideal. Como baterista creo que ya no tiene nada que demostrar. Su experiencia habla por si sola.

Al escuchar cortes como "Something Unreal", "Beyond Reality", "Living In A Cage" y "The Weakest", notamos que esta banda creció muchísimo en esta renovación que sufrieron. Personalmente creo que su vocalista, también logró dar ese gran paso que todo músico necesita y se consolidó bastante logrando tener un estilo que aun promete para mucho más.

Una de las sorpresas del disco es el remake al tema "Powerfiend" (cover a la desaparecida banda FALLOUT, donde tocaba Nacrur junto a Anton Reisenegger –CRIMINAL/PENTAGRAM- a fines de los ochenta). Está bastante bien logrado.

Reborn incluye nueve cortes de muy buena factura que entregan sólo y nada más que una excelente dosis de Thrash Metal "Made in Chile". Puede que para muchos NECROSIS esté muerto, sin embargo, con esta placa las cosas pueden cambiar drásticamente. Este registro tiene las condiciones de marcar una nueva etapa en el grupo. Espero que los aficionados apoyen la música nacional ya que más que mal, es una de las pocas cosas que como chilenos podemos sentirnos orgullosos.

[ Andrés Padilla ]